A nuestras Fiestas en honor de la Madre de Dios, bajo la advocación de la Virgen de la Blanca, se las ha llamado durante siglos Fiestas de Calderas y a este singular día, Domingo de Caridad, también Boda de Santa María en el siglo XV.

         Este domingo se comía comunitariamente por cada Cuadrilla el toro muerto el día anterior. Los gastos que dicho ágape originaba, eran sufragados por repartimiento entre todos los vecinos, según la tradición, pero los judíos y su barrio, situado en las faldas del Castillo, consiguieron declararse exentos de tales repartimientos de unos gastos de las fiestas en las que ellos no participaban y no iban con sus creencias.

         Más cercano en el tiempo, 1110-1119, se sabe que “el domingo siguiente a San Juan  las 16 Cuadrillas del Común, cada una con su Santo Titular llevado en andas por hombres y mujeres, acompañada cada Cuadrilla por su cura parroquial y precedida por un joven que lleva alzado un arguijuelo, ramo, seguido de gaita y tamboril, acudían al encuentro unas de otras a lo largo del Collado. Todas juntas en procesión salían fuera de la ciudad hasta la Puerta del Priorato de San Benito, donde el prior recibía las ofrendas y rociaba con el hisopo las Calderas. Acabada esta ceremonia se retiraban hasta el prado de la Dehesa de San Andrés, donde se repartirían entre todos los presentes, vecinos y forasteros, las raciones de pan y vino, así como las viandas de toro y otros condimentos que contenían las Calderas".

De 1918 data el ya tradicional Uso de que cada Cuadrilla dará a los vecinos que han entrado en Fiestas, un tallo de chorizo, un cuartal de pan, un huevo, un litro de vino y alrededor de 300 gramos de toro cocido. Este año los vecinos no entraban en fiestas por la carestía de vida y el Ayuntamiento tomó el acuerdo de donar las viandas antes citadas, además de un kilo de chorizo, cinco kilos de pan, dos docenas de huevas y dos arrobas de vino a cada Cuadrilla para el almuerzo del Domingo de Calderas. Además se facilitará a los señores Jurados para compras de los toros, cohetes y música.

Hoy es el día grande. Soria se viste de gala.

                                      Hoy tiene el sol más destellos

                              y a su luz nuestra Alameda,

                              muestra toda la hermosura

                              de una inmensa rosaleda.

       Desde el local de la Cuadrilla se bajará a la hora señalada hasta la Plaza Mayor para proceder al desfile de Las Calderas que saldrá a las once en punto en el orden de Cuadrillas que marca la tradición.